Una aventura cicloturista de este tipo siempre es enriquecedora. En primer lugar por la experiencia en sí misma, por la osadía de atravesar un país impulsado por tu propio esfuerzo, pero también por todo lo que conlleva alrededor, por lo colateral, por las inquietudes que antes de arrancar despierta en el ánimo y por las ganas de centrar la atención en aquellos lugares por los que vas a pasar. Uno de los aspectos positivos de este viaje es el acercamiento a ese Danubio espeso y culto de Claudio Magris que nos recomendó José Luis Llorente y cuyo argumento serpentea siguiendo el curso del río que vamos a recorrer. Uno no puede evitar sentirse terriblemente insignificante desbordado por el oleaje abrumador de lecturas de las que hace gala el autor y que a la mayoría de los mortales nos falta.
En su paseo por “El Danubio” Magris recrea con desgarro la vida de algunas mujeres que lucharon por ser distintas pero que finalmente terminaron oprimidas por hombres voraces, sometidas y anuladas o totalmente oscurecidas. Así es, por ejemplo, la conmovedora historia de Marieluise Fleisser de Ingolstadt ("el nombre de la vigorosa escritora siempre se declina con el apéndice de su ciudad natal, como si se tratara de una única palabra, Marieluisefleisserdeingolstadt"),
a quien no es posible disociar de Bertolt Brecht con el que mantuvo una relación tormentosa.
Marieluise Fleisser y Bertolt Brecht |
Autora de intensos dramas históricos (Pioneros de Ingolstadt y Purgatorio en Ingolstadt) que se leen como un grito y que dibujan con rigor la vida asfixiante de provincias y el sometimiento rabioso de la mujer, cuando Brecht la conoce, la introduce en el gran mundo del teatro y la promueve entre los círculos culturales de Berlín. Según Magris, "el encuentro con Brecht fue para la escritora una fortuna intelectual, y probablemente, un infortunio existencial." Todo lo que Marie Luise denunció en sus dramas sobre el avasallamiento histórico del hombre y la sumisión y sujeción de la mujer a los dictados varoniles, lo padeció a su manera con Brecht. Según Magris "en su relación sentimental con Brecht, de que la Fleisser sintió la ardiente necesidad de distanciarse, la autora vivió y sufrió esa dominación masculina" ... "esa obligada mezcla de dedicación visceral y de visceral rebelión que excluye la igualdad y acepta a priori, incluso protestando con rabia, la fatalidad de la violencia masculina sobre la mujer". Después de alejarse de Bretch, Marieluise volvió a Ingolstadt y fracasó en varios intentos de suicidio, tras los cuales se dedicó apasionadamente a desgranar por escrito los mecanismos más oscuros de la condición humana. Recibió varios premios literarios, Fassbinder trasladó a la pantalla su Pioneros de Ingolstadt y unos meses antes de morir en 1974 le concedieron la Medalla al Mérito de la Orden Bávara.
¿Por qué no escribes un libro de mil páginas? Cada vez que leo uno de tus artículos sobre los protagonistas del Danubio, me quedo con ganas de más y más, de seguir leyendo. Josito, mil gracias por brindarnos a tus compañeros de viaje la posibilidad de disfrutar de una prosa tan ilustrativa y poética. Magris también te debe de estar agradecido por convertir algunas de las páginas de su erudito libro en interesantes relatos.
ResponderEliminarMuchas gracias a ti por los halagos que sé que son sinceros pero tampoco tengo duda que desmesurados. Colocarme cerca de Magris es colocar unas gotas de lluvia al lado del Danubio.
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